El sistema cloacal en el centro de Cipolletti está en crisis desde hace tiempo. Ayer se produjo una nueva rotura de la vieja cañería lo que provocó un gran desborde del líquido en la planta baja de la municipalidad, que debió ser precintada.
El desperfecto, que se originó como consecuencia de que la cañería de hormigón ya cumplió su vida útil y se está desmoronando, se produjo en dos tramos: uno en Fernández Oro, entre Sáenz Peña y Brentana, y el otro en Brentana, entre San Martín y Fernández Oro.
Eso derivó en que se desborde la cloaca del edificio que está pegado a la municipalidad, y se inunde la entrada a la comuna, generando un gran malestar entre empleados y las personas que entraban y salían del lugar.
El Jefe de Servicio de ARSA, Fabricio Sánchez explicó que para cambiar la cañería por una de PVC, ayer mismo comenzó a instalarse una especie de by-pass entre cámara y cámara. En total las obras demandarán unos 15 días de trabajo, aunque no será la solución definitiva.