Los cuatro integrantes del comité científico binacional que deberán monitorear los niveles de contaminación de la pastera UPM (ex Botnia) ingresaron ayer por primera vez en la fábrica ubicada en Fray Bentos. Tanto los argentinos Juan Carlos Colombo y Guillermo Lyons como los científicos uruguayos Eugenio Lorenzo y Alberto Nieto entraron cerca del mediodía en la planta de celulosa en lo que se denominó una “actividad preparatoria” para lo que serán los controles definitivos. Según pudo saber Página/12, en rigor no se trató del comienzo de los monitoreos, sino de una inspección ocular propuesta por el Uruguay, en medio de los forcejeos dentro del comité acerca de cómo será la metodología que apliquen para llevar a cabo los controles a la empresa finlandesa.
Los cuatro científicos llegaron alrededor de las 11.50 al portón de acceso de UPM. Allí los esperaban técnicos de la Dinama, que tienen a su cargo la responsabilidad operativa del lado oriental, según fue acordado entre los presidentes Cristina Fernández y José Mujica el pasado 28 de julio. “No estamos empezando nada. Estamos haciendo una actividad preparatoria”, fue la escueta respuesta de Lorenzo a la prensa, según consignó el diario uruguayo El País. El grupo cumplimentó los trámites de rigor para poder acreditarse como visitantes y realizaron un recorrido por la fábrica de celulosa.
Una fuente cercana al comité científico aseguró a este diario que, por el momento, las negociaciones entre los técnicos “están empantanadas”. A pesar de que las cuestiones generales fueron zanjadas entre los cancilleres de ambos países, aún debe ser consensuado cómo se nombrarán los técnicos que tomen las muestras, cuáles serán los laboratorios involucrados en el análisis y demás asuntos vinculados con la metodología del monitoreo. En ese marco, en el que los científicos argentinos se quejan de la intransigencia uruguaya, fueron invitados a realizar “una visita de reconocimiento”. El comité tiene tiempo hasta el 2 de noviembre para entregar a la Comisión Administradora del río Uruguay (CARU) el plan detallado para la ex Botnia, pero se estima que la solución tendría que llegar de la mano de un nuevo acuerdo diplomático. Las mismas fuentes estimaron que, entonces, los primeros muestreos podrían dilatarse hasta los primeros meses del próximo año. Gualeguaychú, por su parte, tendrá un ojo puesto en lo que sucederá cuando UPM deba detener su funcionamiento en las siguientes tres semanas para realizar tareas de mantenimiento.