La disminución en los volúmenes de agua de las distintas cuencas mendocinas y los bajos niveles de escurrimiento de los ríos, hecho detectado y comprobado por los técnicos de Irrigación, se han convertido en una señal de alarma para el suministro domiciliario de agua, el riego de las áreas agrícolas y la utilización de ese bien por parte de la industria.
El titular de la flamante Aguas Mendocinas, Rolando Baldasso, anunció que uno de los puntos que se atenderá es la baja presión que registran algunas zonas, principalmente en Guaymallén, y se lo hará con el servicio de perforaciones, algunos de las cuales ya están en ejecución.
También se buscará el aumento de producción en las plantas, como la de Benegas. Otra planta que será mejorada es la de Potrerillos, hoy con niveles de reserva críticos, según aseguró el ex titular de Hidráulica.
Este funcionario abordó lo que sería uno de los costados más acuciantes de la realidad hídrica, la excesiva utilización del vital elemento por parte del mendocino.
"Consumimos -dijo- mucho más agua de lo recomendable; esto nunca se logró bajar, por lo menos desde los años 1995/?96. Estamos en una producción bruta de 690 litros por habitante/día y un consumo real de 600 litros/habitante. Si no hay un cambio cultural, especialmente en las zonas más densamente pobladas, será difícil salir de la crisis".
Lo ideal sería llevar ese valor a 250 litros/habitante, como recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Colgados
Otro flanco de acción es el acueducto Potrerillos, donde se detectan pinchaduras y la utilización del líquido en forma clandestina, especialmente en Chacras de Coria, en la parte de atrás de los boliches de ese distrito. Allí se detectaron usuarios colgados para abastecer casas de alquiler temporario. Baldasso prometió una campaña "muy fuerte" para sacar esas uniones ilegales de los conductos maestros, lo que recuerda la toma no autorizada de electricidad.
Otro mecanismo de combate para quienes derrochan, es el aumento de los valores de las multas y la extensión de horarios de prohibición de ciertos riegos. Se está acordando con el EPAS un incremento de los castigos en dinero: llevar de $ 55 a $ 63 la primera multa en el uso de riego doméstico de jardines en horario no habilitado, y si hay regadío de calles y veredas, que está siempre prohibido, elevar el gravamen de $ 80 a $ 130, con duplicaciones de los valores con cada reincidencia.
Estos mayores costos por infracciones tendrán que ser aprobados por el Ente Provincial del Agua y de Saneamiento (EPAS), como indicó su presidente, Javier Montoro. Este último adelantó que se está analizando el uso restringido del agua potable de 8 a 20, en cuanto a la responsabilidad, en el período estival comprendido entre el 1 de setiembre y el 31 de marzo. Una alternativa es ampliar el lapso de lo que está prohibido realizar.
En paralelo, se prometió una campaña de control de pérdidas y fugas, algo en lo que ya venía trabajando desde la repartición intervenida. Además, difundir entre la población técnicas de mantenimiento del agua en piletas de natación.
Como el problema hídrico no es de un sólo sector del Estado y de la sociedad, se convocará a los municipios y las organizaciones de la sociedad civil para coordinar políticas en la materia. También tallarán la Dirección General de Escuelas y el Ministerio de Salud, con la realización de jornadas de concientización sobre el uso del recurso en los establecimientos educativos.

Riego agrícola
El Ministerio de Infraestructura incentivará los subsidios para que más fincas apoyen su regadío con la utilización de pozos, y por eso se agilizarán medidas para que estas instalaciones se pongan en marcha, reduciendo la utilización del agua superficial.
Por su parte, el senador Vicente Russo anunció un proyecto para autorizar al Ejecutivo a tomar financiamiento en organismos internacionales que financian tecnologías de riego,con destino a productores. Igualmente se quiere acelerar la ejecución del dique Portezuelo del Viento, en el sur provincial, que posibilitará el estratégico vuelco de las aguas del río Grande a Atuel, con lo cual los mendocinos aprovecharán 34 m3 que proveerá ese complejo.
Desde el Fondo de la Transformación se anunciaron préstamos con destino a agricultores, con intereses no muy altos, más los reintegros de obras realizadas por productores de hasta 40%, con intervención del Prosap (Programa de Servicios Agrícolas Provinciales), para prohijar el uso eficiente de las dotaciones de riego. Igualmente se ha solicitado la priorización de obras al Enohsa (Ente Nacional de Obras Hídricas y Saneamiento), que han sido presentadas por el Ente Provincial de Agua y Saneamiento (EPAS).