El vacío de la legislación provincial y los litigios que mantienen entre sí, desde hace años, quienes reclaman derechos sobre los terrenos del río El Tala, han permitido hasta la fecha la ocupación al menos irregular de lotes a lo largo del trazado de la Ruta Provincial Nº 4 y a la vera del río en numerosos puntos. Y a causa de esta ausencia de regulación, uno de los aspectos más delicados surgido del asentamiento de personas es la generación de residuos orgánicos que se vuelcan al agua de El Tala, lo que ya encendió señales de alarma entre funcionarios de la provincia.
Si bien los asentamientos se produjeron, algunos de ellos, hace más de una década, en la Legislatura provincial se motorizaron en los últimos días reuniones para establecer líneas de acción o, eventualmente, proyectos de legislación.
La diputada Silvina Acevedo justamente ofició de anfitriona en dos reuniones que se realizaron la semana pasada en la Cámara de Diputados, en la que se intentó analizar "el riesgo hídrico, la importancia geológica, histórica y paisajística que reviste esta cuenca" del río El Tala.
De los encuentros participaron funcionarios de Vialidad Provincial, la Dirección de Catastro, de la Municipalidad de la Capital (por el Plan Urbano Ambiental), la subsecretaría del Ambiente, representantes de la Orden Franciscana y de las áreas de Geografía y de Antropología de la Universidad Nacional de Catamarca.
Todos los actores coincidieron en un punto: la ocupación de los terrenos dejó de ser un problema eventual para convertirse en una temática delicada, áspera y de muy difícil abordaje, porque la cantidad de personas que construyeron sus viviendas o que se asentaron en la zona en forma ilegal, ya supera, por ejemplo, la cantidad de vecinos que tienen su casa de veraneo en la zona.
En este marco, la legisladora sostuvo que “la intención de conformar este equipo interdisciplinario es aunar criterios y buscar soluciones, sin que nadie salga perjudicado, porque es un tema que nos compete a todos los catamarqueños. Acciones tendientes a la preservación de este pulmón verde y el respeto por los derechos públicos y privados es lo que nos guía a todos quienes integramos este equipo, del cual simplemente me he constituido como un nexo”.
Uno de los puntos que se dialogó en el encuentro, se indicó extraoficialmente, es intentar impedir que se concreten nuevos asentamientos de personas en la zona, por lo menos hasta el próximo mes de marzo de 2011. Para posibilitarlo, se mantuvieron algunos contactos informales con autoridades de la Policía de la provincia.
Otra definición que surgiría de estas reuniones es comprobar la situación legal de cada terreno, dado que hay disputas legales entre quienes reclaman derechos sobre varios puntos del río, la ruta y los campos.

39- Es la cantidad de kilómetros que hay desde la Capital hasta El Rodeo, por la ruta provincial Nº 4. A lo largo de la ruta y del río se ubican asentamientos irregulares.