Hasta el próximo lunes 25, se realizará en toda la cuenca cañera la primera consulta pública referida al proyecto de riego de 10 mil hectáreas para el Polo Sucro-Alcoholero, poniéndose énfasis en los efectos ambientales.
La Ing. Elena Sandoval, del Centro Operativo Experimental Tacuarendí (Coet), informó que “se están exhibiendo las fichas ambientales de la primera idea-proyecto que se presentó, y el estudio ambiental de las alternativas realizadas por la consultora del Prosap; ya que es un megaproyecto que tiene una categorización A en cuestión ambiental, y por lo tanto exige un estudio de impacto ambiental, ya que el lugar es un Sitio Ramsar (protegido por leyes internacionales) y es el valle de inundación de un río.
El proceso de estudio ambiental exige como primera instancia, consultas públicas para que los beneficiarios directos, la población en general y algunas organizaciones ambientales se acerquen y conozcan el proyecto”.
La profesional indicó que “los estudios que estamos exhibiendo exponen aspectos de la obra pública, la obra interpredial, nuevas estaciones de energía, fortalecimiento institucional y capacitación, ésos son los componentes del proyecto; los tres primeros, en forma decreciente, son los que generan impacto ambiental.
La obra pública está realizándose en el valle de inundación del río Paraná, por lo que tenemos que prever no sólo los movimientos de tierra que se hagan, las posibles crecidas del Paraná, y si hay alteración en la fauna y flora; sino también que, al llegar al domo, se afecte la menor cantidad de superficie productiva, con una traza de canales paralela a la de los caminos rurales, y la erradicación de asentamientos poblacionales, que en este caso no lo hay, porque si no sería mucho más exigente el estudio”.
“La consultora evaluó la caracterización geográfica de la zona, en cuanto a clima, suelo, agua, flora y fauna, y las posibles alteraciones que puedan provocar las cinco alternativas que se manejan para la toma de agua, tres en Puerto Ocampo, una en Piracuacito (El Rabón) y otra en Piracuá (Florencia). Estos estudios son preliminares, porque se van a ir profundizando cuando se determine la traza definitiva.
Necesitamos que la gente se informe convenientemente y que cualquier planteo que quieran hacer al respecto lo hagan ahora, en el momento oportuno; ya que los beneficios del proyecto sobrepasan muchísimo a los aspectos negativos”, explicó Sandoval.