Los presidentes de siete consorcios del sistema de riego del Alto Valle expresaron a las autoridades de la Dirección Nacional de Vialidad su preocupación por la nueva traza de la ruta 22, en la zona de la localidad de General Enrique Godoy por la eventual dificultad para la limpieza del sistema de drenaje.
La inquietud radica en “poder disponer libremente de lugares habilitados para efectuar la limpieza a lo largo y en paralelo a la ruta nacional 22 en su nueva traza” y la posibilidad de contar con un amplio espacio para el trabajo de maquinarias, como dragas, dragalina, excavadoras, cargadoras y camiones.
“De no tener disponibilidad necesaria y la seguridad vial para ello el natural sistema de riego provocaría un levantamiento en la napa freática en toda la zona, principalmente la lindera a la ruta. Tal omisión genera o generará a futuro un daño que de ser reclamado por los productores implicaría un sinnúmero de acciones legales con los perjuicios patrimoniales que ello acarrearía”, consignó uno de los párrafos de la nota que presentaron al director de Vialidad Nacional en General Roca, Manuel Foglia.
Por otra parte, puntualizaron que “con la posibilidad de que una de las formas de alivianar la congestión natural del tránsito pesado y liviano había dos alternativas posibles: primero, la construcción de una vía por el Norte del Alto Valle y que vincule todas las localidades, desde Chichinales hacia Cipolletti”.
La otra alternativa, según describieron, es por la margen del río Negro uniendo Pomona y Balsa Las Perlas, aunque reconocieron que “no tuvo eco, pero que vale la pena recordarla en función de la experiencia que estamos teniendo con el nuevo tramo pronto a culminar”.
La nota fue firmada por los presidentes de los siguientes consorcios: Benito Castillo (Cinco Saltos), Eduardo Artero (Cipolletti), Martín Fernández (Allen-Fernández Oro), Angel Spampani (General Roca), Manuel Delgado (Cervantes), Andrés Moschini (Ingeniero Huergo) y José Teruel (Villa Regina).