Los 63 milímetros de lluvia registrados hasta las 18 de ayer en Sierra de la Ventana, sobre la cuenca del río Sauce Grande, permiten inferir al menos una mínima recuperación de las reservas existentes en el dique Paso de las Piedras.
Si bien a primera hora de la víspera las mediciones en el embalse arrojaron una cota de 154,04 metros sobre el nivel del mar y por la tarde 154,06, es decir, dos centímetros más, habrá que esperar hasta el lunes para que la onda de crecida se manifieste en toda su magnitud sobre el embalse.
El fenómeno meteorológico de ayer no deja de ser un paliativo de importancia para las castigadas reservas del dique, sobre todo porque la zona se encuentra en plena temporada de precipitaciones y, sin lluvias en octubre-noviembre, el panorama de cara al verano podría presentarse extremadamente difícil.
Tal como sucedió el año pasado, aunque de manera insuficiente como para salir de la emergencia hídrica, esta es la etapa en la que debe llover para asegurar el abastecimiento durante los meses de verano.
Hasta ahora, si la región suma algunas lluvias más antes de enero y febrero, las condiciones de suministro de agua potable a las poblaciones de Bahía Blanca y Punta Alta serán similar a las evidenciadas en la pasada temporada estival.

En Bahía. Más de 30 llamados al 911 fue el saldo de la tormenta que, durante la madrugada de ayer, se desató en la ciudad, donde se registraron unos 40 milímetros en pocas horas.
Los anegamientos de viviendas acapararon los pedidos de auxilio, por lo que personal de Defensa Civil y de los cuarteles de bomberos voluntarios y de la policía bonaerense debió realizar extracciones de agua mediante bombeo.
"La gente especula con la falta de lluvia y posterga tareas de mantenimiento en las casas que son necesarias. Por eso, junto con la tormenta, aparecen los problemas", dijo Mario Tejeda, jefe de Defensa Civil, área que comenzó a trabajar desde la medianoche de ayer.
También se vieron afectadas muchas calles, principalmente, las de tierra. Los trabajos para remediar el suelo demandará varios días, habida cuenta que los empleados municipales deberán esperar que el suelo seque para poder nivelarlas con las máquinas viales.

Escuelas afectadas
Al menos diez establecimientos educativos denunciaron ayer temas menores de desbordes o filtraciones debidos a la precipitación pluvial de la víspera.
Se trató básicamente de escuelas primarias, aunque los hechos registrados no implicaron la suspensión de las actividades, salvo en la EP Nº 60 y la ESB Nº 319, de Villa Amaducci.
Estas instituciones fueron las más perjudicadas, debido a que a la crítica situación edilicia que afrontan, se sumaron desbordes cloacales, que afectaron a dos aulas y la dirección, por lo que 500 alumnos, de entre 6 a 14 años, no tuvieron clases.
En el lugar está pendiente una refacción de los sanitarios y de varias dependencias, por un valor de 370 mil pesos, pero la licitación, que se realizó luego de un año y medio sin convocatorias, no tuvo oferentes y, por el momento, no hay nueva fecha de compulsa.