Los moradores de las fincas bananeras, ubicadas en el distrito de Barú, temen que se dé una epidemia por la falta de agua potable.
En Finca Jocote los pobladores abrieron un pozo a orillas de un canal que lleva aguas negras para conseguir el líquido que necesitan para los quehaceres del hogar.
Mientras , caminan más de tres kilómetros para conseguir agua limpia para el consumo.
Lorenzo Zurdo Sire, afectado, sostuvo que aunque no quería que su familia consumiera agua de este lugar, no le ha quedado otra alternativa.
Manifestó que lo que más le preocupa es que ya comenzaron a confrontar problemas de salud y puede darse una epidemia.
Solicitó al Instituto de Acueductos y Alcantarillados Nacionales (IDAAN) que atienda el desabastecimiento de agua en la zona bananera.

Protesta.
Preocupados por la escasez de agua los afectados cerraron la carretera principal que va desde Paso Canoas, hasta Puerto Armuelles, para llamar la atención de las autoridades locales.
La medida también fue apoyada por varios transportistas que trabajan en las rutas de las fincas bananeras y que aprovecharon para pedir que los viejos caminos de estos sectores sean arreglados.
"Ya nosotros no sabemos que hacer con estos caminos y a veces no podemos dar un buen servicio a la comunidad porque los caminos están pésimos; allí no hay huecos si no grandes cráteres que son un peligro", dijeron.

Daño.
Según el IDAAN, el agua no llega a las fincas bananeras porque se dañó una turbina de la planta potabilizadora.
Agilizan las respectivas reparaciones para evitar que las personas sigan consumiendo agua sin potabilizar.
El líquido que consumen los lugareños proviene de un ojo de agua ubicado en las faldas de un depósito de basura.