Hasta la fecha, la Empresa Municipal de Saneamiento (Emsa) de Puno clausuró más de 150 conexiones clandestinas que descargaban aguas servidas al Titicaca, el lago navegable más alto del mundo.
En proceso se encuentran las gestiones para sancionar a los responsables del vertimiento de aguas residuales, informó este miércoles la gerente de Medio Ambiente y Servicios de la comuna puneña, Griselda Gudiel Morales.
Mientras tanto, autoridades del sector Salud y representantes de la municipalidad provincial de Puno y del Ministerio Público continuarán verificando la existencia de conexiones clandestinas en la zona.
"En el acceso a la bahía interior hemos encontrado vertido de aguas que no tenemos el cien por ciento de seguridad que sean limpias. Tenemos que hacer las verificaciones a través de toma de muestras u otras acciones", señaló.
Antes de fin de mes las autoridades mencionadas inspeccionarán la existencia de empalmes clandestinos donde se encuentran más de cinco hoteles ubicados cerca al lago Titicaca, adelantó en diálogo con la agencia Andina.
"Los hoteles tienen que tener una planta de tratamiento, no basta con que tengan desagüe", anotó, tras considerar el vertimiento de aguas residuales como la principal causa de la contaminación del lago altiplánico.
El lago Titicaca, compartido por Perú y Bolivia, postula al concurso organizado por la Fundación New 7 Wonders para elegir a las siete maravillas naturales del mundo, ubicándose actualmente en el casillero 31.