En la forma en que concibe el poder el kirchnerismo, la fidelidad se premia. Así quedó demostrado ayer: la presidenta Cristina Kirchner viajó a esta provincia y elogió al gobernador Gerardo Zamora, que jugó fuerte en favor del oficialismo en medio del conflicto entre el Gobierno y el campo.
"Sé que ustedes tienen un gobernador de lujo, que trabaja todos los días por ustedes y por los que menos tienen", dijo la jefa del Estado en su discurso, en lo que fue un claro gesto hacia el mandatario santiagueño, a pesar de que su ex vicegobernador, Emilio Rached, fue uno de los senadores que produjeron el empate en la histórica sesión del Senado, que desempató el vicepresidente Julio Cobos con su voto "no positivo".
"Ustedes, los que menos tienen, deberían estar enojados y protestando, pero no, están siempre dándonos fuerza y apoyándonos. Sepan que yo siento un gran orgullo por eso", destacó la Presidenta. Y agregó: "No hay que hablar con eufemismos. A veces siento que los que menos tienen sienten vergüenza de su situación. Hay una Argentina rica y una Argentina pobre, y hay que hacer el esfuerzo para compensar las desigualdades".
Pareciera que las heridas causadas por el conflicto con el campo no cicatrizaron en el kirchnerismo. "No basta con intentar y proyectar, hay que tomar las decisiones de gobierno para devolver justicia y dignidad a los argentinos", destacó Cristina.
"Cuando uno recorre el país profundo -continuó- puede conocer en serio a los verdaderos productores agropecuarios y puede comprobar la complejidad del tema."
Acompañada por el ministro del Interior, Florencio Randazzo, Cristina Kirchner fue alentada por mujeres que escuchaban su discurso desde la tribuna, a quienes les respondió, sonriente: "Claro que no voy a aflojar, hermana, ni abajo del agua".
"Vamos a derrumbar esos obstáculos porque tenemos una historia que honrar, la de nuestros padres y abuelos, que con mucho menos construyeron un país que otros se empeñaron en destruir", enfatizó.
Si de gestos se trata, la mandataria también le dio un fuerte espaldarazo a Fernando Salim, que fue compañero de bloque de la Presidenta cuando ambos eran diputados nacionales. "Fernando se ríe porque sabe cómo lo peleaba en el bloque", agregó.
Frías, 180 kilómetros al oeste de la capital santiagueña, fue la localidad elegida por la Presidenta para anunciar un plan de obras para la provincia por más de 960 millones de pesos. Una de ellas será la creación de una planta de tratamiento de residuos cloacales, y el apoyo a los distintos emprendimientos caprinos. El intendente le agradeció la visita y las obras para la provincia.
El gobernador Zamora, que este año peleará la reelección en su provincia, destacó que la Presidenta hubiera visitado esa provincia dos veces en menos de cuatro meses. "Cuando golpeamos y pedimos cosas simples o importantes para nuestra provincia siempre nos cumplen", agradeció Zamora.