Alrededor de 30.000 personas resultaron afectadas por las inundaciones en el sur de Chad y, entre ellas, unas 10.000 perdieron sus hogares, informó este lunes la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA).
OCHA señaló que hubo tres muertos al colapsar su vivienda y ocho personas están malheridas.
Las lluvias torrenciales no han cesado desde finales de julio. El organismo de la ONU señaló que lo que se necesita de manera urgente son refugios, purificadores de agua, elementos de primeros auxilios y suplementos nutricionales.
Por su parte, la Organización Mundial de la Salud alertó sobre posibles brotes de malaria, diarrea y afecciones respiratorias.
Chad es una nación afectada por una grave crisis humanitaria. En ese país residen miles de refugiados sudaneses y centroafricanos, además de centenares de desplazados internos.