”Hace 60 años que falta agua en Tafí Viejo. Pero abundan las roturas de cañerías -algunas tienen más de medio siglo-. Además, las pérdidas convierten determinadas calles en verdaderos arroyos o charcos”, dijo a LA?GACETA Dora Hollenstein. La mujer se encontraba entre los más de 200 vecinos de distintos barrios taficeños, que ayer reclamaron ante la SAT por la situación que padecen a diario.
Además, entregaron al jefe de la agencia de la SAT de ese municipio, Ricardo Araujo, un petitorio con la firma de más de 3.000 personas. Solicitaron “una inmediata respuesta al pésimo servicio que brinda esa empresa”.
“Hay sectores de la avenida Alem hacia el norte que sólo tienen agua durante dos o cuatro horas, y a veces hasta menos tiempo, por día”, dijo Matilde Salinas. “En otros lugares, las cañerías son nuevas pero de material inadecuado o fueron mal colocadas. A veces, las cañerías son reparadas, pero los arreglos rompen el pavimento y quedan baches diseminados por toda la ciudad”, subrayó Carlos Ahumada.
“Aparte de los cortes, que cada vez son más largos, el agua sale con baja presión y hasta contaminada. Creo que el Gobierno provincial se olvidó de Tafí Viejo. Voy a cumplir 73 años y no tengo problemas en decir que me parece que el gobernador está rodeado de inoperantes y mentirosos”, añadió indignada Irma Gladys Assaf.
“La empresa proveedora del servicio nos obliga a vivir en situaciones de precariedad”, denunció Norma Piamonte. Más drástica y conmovedora en su reclamo fue Dora Vanzel, que mostró una copia de la historia clínica de su hijo Lucas Espinoza, de 12 años. Según el documento, el pequeño estuvo internado en el Hospital de Niños desde el 21 de julio al 1 de agosto con un cuadro gastrointestinal causado por un enterovirus del agua. Dora anunció que demandará por daños y perjuicios a la SAT.
Los vecinos, que entregaron copias del petitorio al intendente de Tafí Viejo, Javier Pucharras, y al gobernador, José Alperovich, se reunirán hoy a las 12 con técnicos de la SAT para discutir el tema.
“No tengo una solución inmediata al problema sino gradual. La falta de agua en Tafí Viejo es una cuestión estructural y estacional. Con el plan estratégico de obras que se está ejecutando se subsanará este inconveniente, pero en términos y plazos más largos de lo que los vecinos desearían”, anticipó a LA?GACETA, el al jefe de la agencia de la SAT en Tafí Viejo, Ricardo Araujo. “Los cortes de agua son programados. Es la única forma de cumplir con el servicio. Como contrapartida, se hizo una rebaja en el costo de la prestación”, explicó. Dijo que se necesita 1 millón de litros de agua por hora para todos los usuarios. Pero sólo hay 15 pozos y cada uno provee 5.000 litros por hora.