Con alivio, aunque con la salvedad de que tendría que haber llegado antes, se recibió a nivel de las gremiales del agro la información que este lunes entrará en vigencia el decreto que declara el "estado de emergencia agropecuaria".
Con esa norma quedarán a disposición del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca los fondos necesarios como para encontrar paliativos a la falta de pasturas, que en muchos casos tiene a los productores al borde de la desesperación.
El panorama es crítico en diversas zonas y abarca a todos los subsectores, aunque la alta dependencia del agua y la alta tecnificación de los establecimientos golpea a los tamberos en forma especialmente aguda.
Así dijo a LA REPUBLICA el ex presidente de la Asociación Nacional de Productores de Leche (ANPL), Carlos Arrillaga, quien señaló que ahora lo más importante es que se adquiera forraje en Argentina y se instrumente rápidamente su distribución en nuestro medio.
Para mañana por la noche se espera una trascendente reunión de la directiva de la Federación Rural del Uruguay (FRU), de la que pueden surgir iniciativas concretas de parte de los productores a efectos de dar su colaboración para el reparto de las raciones.
Eso fue lo que dijo ayer a LA REPUBLICA el presidente de la FRU, Octacilio Echenagusía, quien se refirió a la excelente experiencia acuñada dos años atrás, cuando la falta de agua se agudizó en el norte del país, y se logró una excelente complementación entre los productores y el sector oficial.
Echenagusía se congratuló de que "por fin" se hubiera dispuesto la declaración de estado de emergencia agropecuaria, tal como reclamaban los productores.
El martes, mientras tanto, se reunirá el Grupo Operativo de Sequía, con el objetivo de poner en marcha todo el paquete de medidas involucradas en el decreto de emergencia agropecuaria.
De acuerdo a lo dicho el viernes por el ministro de Ganadería, Ernesto Agazzi, a LA REPUBLICA, las soluciones comenzaron a considerarse en 2005, dentro del Sistema Nacional de Emergencia, en la evidencia de un proceso de cambio climático.
Según el ministro, las prioridades se centran en las familias rurales, y para la sanción del decreto de emergencia se esperó hasta este último viernes, en la medida en que a nivel oficial se esperaban abundantes lluvias.
"Esto se arregla con lluvia y plata", comentó Arrillaga, quien celebró la decisión del gobierno, aunque comentó que hubiera sido mejor si la estrategia se implementaba dos semanas antes.
"Estamos al lado del granero del mundo", comentó en referencia a la vecindad con Argentina y a la forma de encarar las tratativas para la compra de raciones, que la Federación Molinera de ese país solicita "se haga de empresa a empresa".
"Ya tenemos la experiencia del afrechillo que se trajo para el norte", dijo, y comentó que Conaprole ya cuenta con la estructura necesaria. "Eso sí, tiene que ser lo más rápido posible" y subrayó que "el afrechillo, el forraje, tienen que venir cuanto antes, con el acuerdo entre empresas y el apoyo del Ministerio, no hay otra posibilidad".
Mientras, nuestro corresponsal en Rocha, Hugo Luján Amaral, indica que la intendencia postergó el vencimiento de la contribución inmobiliaria rural de enero a mayo y se trabaja en un plan de aguadas para todo el departamento, coordinando con las gremiales agropecuarias.
En la Intendencia de Canelones se instrumentaron medidas para apoyar a los productores familiares en situación crítica con el abastecimiento de agua potable, agua para animales, y limpieza de aguadas y tajamares.
En Cerro Largo, donde la situación es extremadamente crítica, el corresponsal Agustín Delarrosa destaca que la sequía se hace más grave en el polo de desarrollo arrocero, donde la falta de agua incide notoriamente en las áreas de cultivos y en los rodeos.