El Ente Regulador de Servicios Públicos (ENRE) recibió nuevos cuestionamientos de la Unión de Usuarios, quien ya había cargado las tintas contra el organismo por su actuación en el marco del pedido de aumento tarifario que hizo Aguas de Catamarca.
El titular de la entidad de defensa del consumidor, Víctor Bollada, puso en duda la función actual del organismo, y dejó entrever que "no tiene aceptación ni credibilidad" entre los clientes de las empresas de servicios públicos.
El dirigente vecinal calificó al ente como "un monstruo de dos cabezas". "Antes, cuando eran privados los servicios, una de las cabezas estaba en las empresas y la otra en el bolsillo del ENRE; ahora, como hay una sola cabeza (que es el Estado) lo que está queriendo hacer es incrementar las tarifas para que se le aumenten los fondos de la tasa", dijo en declaraciones periodísticas.
Bollada recordó que en Capital, Valle Viejo y Fray Mamerto Esquiú, los usuarios pagan una doble tasa de contralor: por el servicio de agua y el de luz. El primero, sin embargo, ya está operado por una empresa con mayoría estatal, y el segundo seguiría el mismo camino.
La Unión de Usuarios había cargado antes contra el organismo por no congelar el pedido de aumento tarifario de la operadora de la prestación sanitaria, del 40 por ciento como parte de un incremento del 180 por ciento para los próximos cinco años.
Para la asociación, la empresa debería haber corregido antes una serie de falencias en el servicio, para recién justificar la pretensión de incrementar las tarifas. También recordó que, en función de que haya una suba en las boletas, la tasa de inspección del ENRE mejorará.
Por otro lado, el organismo recibió críticas por no impulsar la modificación del régimen tarifario del agua, que para los usuarios del sistema de "renta fija", es decir, que no tienen medidor, es claramente injusto.
El problema está dado porque el criterio de cálculo para los usuarios sin medidor, tiene en cuenta aspectos de la vivienda como la dimensión del terreno y hasta los elementos de confort, entre otros.

TC
El ENRE recibió otras críticas por su rol actual. En diciembre, el presidente del Tribunal de Cuentas, Mardonio Díaz Martínez, opinó que con la vuelta del servicio de agua potable al Estado provincial, y en caso de que la provisión de energía corriera la misma suerte, el organismo dejaría de cumplir la función para la cual fue creado: el control de las privatizadas.
Díaz Martínez dijo que "el TC es el único órgano competente para intervenir en el control de las cuentas del Estado provincial; organismos como el ENRE dejan de tener sentido".
De esta manera, el funcionario justificaba parte de las contrataciones que el Tribunal estaba realizando, "en razón del control de las regalías mineras, y la nueva situación estatal con la empresa del agua que antes estaba en manos de privados, a lo que podría sumarse EDECAT". No obstante, en ningún momento hizo mención a cómo realizaría el control técnico de las empresas de servicios públicos, aún cuando éstas fueran del Estado.