A una semana de haber asumido en la Dirección Provincial de Obras y Servicios Sanitarios, y luego de destrabar el conflicto que existía con los trabajadores del sector, ayer la gobernadora Ríos resolvió echar a Carlos Saladino de la Presidencia. La decisión sorprendió al funcionario, quien dijo desconocer las razones de su expulsión. El secretario de Gobierno, Rubén Banthje, sostuvo que la medida respondió a que Saladino no respetó las instrucciones recibidas para destrabar el conflicto con el personal del ente.
Cuando todo hacía presuponer que la situación interna de la Dirección Provincial de Obras y Servicios Sanitarias tendía a pacificarse, la gobernadora Fabiana Ríos resolvió reemplazar a Carlos Saladino de la Dirección de ese ente, en aparente disidencia con la resolución firmada por el ex funcionario a mediados de esta semana, mediante la que había dispuesto dar pleno cumplimiento al acuerdo de readecuación salarial firmado por las partes el año pasado. Esta decisión implicaba para el organismo afrontar un incremento del gasto salarial de unos 90 mil pesos al mes.
La noticia se conoció a menos de 24 horas de que los empleados de Obras Sanitarias resolvieran levantar la medida de fuerza que venían sosteniendo desde hace casi 70 días, y el principal sorprendido fue el propio Saladino, quien se enteró de la novedad en horas del mediodía, cuando personal del ente le comunicó telefónicamente que había sido removido del cargo y reemplazado por Hugo Abal, quien hasta ese momento se desempeñaba en el cargo de vicepresidente.
El jueves de la semana pasada, durante la toma de juramento del ex legislador justicialista Carlos Saladino y otros funcionarios, Ríos había destacado la incorporación a su equipo de colaboradores de "dirigentes de otras fuerza políticas" como una clara demostración "de la apertura de un Gobierno que entiende y cree profundamente que las buenas personas, que la gente capaz, que la gente honesta, no está ubicada sólo y determinadamente en un lugar, sino que estamos todos en distintos lugares y todos desde distintos lugares podemos aportar".
A 8 días de aquel entonces, y sin que mediara explicación alguna, la Gobernadora lo "eyectó" de su cargo.
Lo llamativo de esta remoción, es que Hugo Abal, quien fue designado en su reemplazo, le habría asegurado ayer a agentes de Obras Sanitarias que no iba a dejar sin efecto la resolución firmada por Saladino. Claro que esas mismas fuentes gremiales interpretaron que la medida adoptada por el renunciado presidente tiene "poca vida".

"Me dijo que destrabara el conflicto, y es lo que hice"
En declaraciones a éste y otros medios, Saladino se mostró tan sorprendido como molesto por la decisión adoptada por Fabiana Ríos. Interpretó que su remoción no estaba vinculada a la forma en que resolvió el conflicto en la Dirección a su cargo, ya que aseguró que la indicación recibida de parte de la Gobernadora fue que "solucionara el conflicto. La instrucción fue: poné en marcha la Dirección para que empiece a trabajar, pero no me dijo ni la forma ni el modo de hacerlo, así que no creo que me hayan echado por haber excedido alguna instrucción", señaló.
Es más, aseguró que el había impuesto a ministros y al legislador Raimbault sobre "la naturaleza del conflicto y que para destrabarlo había que hacer frente a lo que se había firmado, por lo que lo único que podía hacer para solucionar el conflicto era acordar lo que acordé con los trabajadores". Si bien reconoció que al informar su decisión de avanzar en tal sentido se le había señalado "que el Gobierno no podía demostrar ante los otros agentes estatales que en una determina área se iban a afectar más recursos presupuestarios a salarios, no me dijeron de manera expresa que no lo hiciera".
Por tal razón no descartó que en su forzado e involuntario alejamiento existan otras razones que no supo o no quiso precisar.
De todas maneras, y de manera un tanto indirecta, apuntó sus sospechas hacia Manuel Raimbault. Sostuvo que el parlamentario fue quien, sin consultarlo, dispuso que Hugo Abal asumiera como vicepresidente del ente. Además lo cuestionó con dureza al señalar, en declaraciones a Radio Nacional Ushuaia, que "parece que le lavaron la cabeza con soda cáustica desde que asumiera como legislador a la fecha, ya que no es el mismo que reivindicaba todas las consignas laborales que reivindicaba y que yo sigo reivindicando".

"Fue con instrucciones y no las cumplió"
En sentido totalmente contrario a lo sostenido por Saladino, el secretario de Gobierno, Rubén Banthje, señaló que la remoción del funcionario respondió a que incumplió las instrucciones recibidas respecto a la manera en que debía solucionar el conflicto en Obras Sanitarias.
Banthje sostuvo, en Radio Nacional Ushuaia, que "la forma en que destrabó el conflicto podía comprometer erogaciones de fondos que no estaban contempladas", y que ésa "no era la forma que había planteado el Gobierno para resolverlo". De manera taxativa justificó la decisión de la Gobernadora argumentando que Saladino "fue con instrucciones y no las cumplió".

¿Cambios en Trabajo?
Según trascendió, en los próximos días podrían producirse cambios en el gabinete del Ministerio de Trabajo, ya que el secretario y subsecretario de esa cartera, Walter Luciani y Alberto Noal, estarían evaluando presentar sus renuncias.