El ministro de Acción Cooperativa, Luis Jacobo exhibió ayer una nota enviada al secretario de Energía de la Nación, Daniel Cameron, en la que Misiones hace expreso el rechazo al proyecto de Garabí con un solo corte, como pretendía avanzar Brasil con el acuerdo argentino. Según explicó, la misiva, fechada el 6 de mayo pasado, surge como respuesta a una visita de Cameron a la provincia, en la que el funcionario nacional expresó el interés de Brasil por avanzar con la obra como figuraba en el proyecto original -con anuencia argentina-, es decir con un solo corte y con un área de inundación de al menos 80 mil hectáreas. Después, la propia empresa estatal Eletrobrás, anunció que contaba con el dinero necesario para iniciar la obra “a fin de año”.
Sin embargo, Jacobo aclaró que en marzo se inició el estudio preliminar sobre todo el lecho del río Uruguay que debe durar 18 meses y en septiembre recién producirá su primer informe sobre el que habrá bases serias para opinar.
Pero de ninguna manera Misiones aceptará la construcción de Garabí si se pretende un solo corte y aun en dos cierres sobre el río Uruguay, debe garantizarse que los misioneros cuenten con energía “suficiente a un costo sensiblemente inferior” al que hoy se paga y que “el aporte del importante recurso sobre el que ostentan el dominio originario, redunde en un esquema justo de distribución de beneficios con el gobierno nacional”.
“Misiones quiere ser socia del emprendimiento y sentarse en la mesa de negociaciones con Brasil”, insistió Jacobo.
El ministro advirtió que “Misiones es el principal escollo para un emprendimiento hidroeléctrico en la región” a partir del No a Corpus y que “el apuro de Brasil y de la Argentina no implica que se acepte cualquier condición”.
“Un solo cierre no es lo que Misiones acordó”, explicó y ante una pregunta de este medio, sobre si el costo de la obra en dos cierres podría influir en el interés brasileño por avanzar con el proyecto original, sostuvo que “en dos cierres sería mayor, pero acá no estamos hablando de un emprendimiento privado, que mide costo y beneficio económico, si no de dos Estados, que deben medir también el costo ambiental”.

El factor político
Jacobo consideró que el factor político también debe considerarse a la hora de evaluar los cierres de la represa de Garabí, ya que un solo corte además de inundar una superficie mayor, chocaría contra el interés de los intendentes de Corrientes y Misiones.
“Dos cortes beneficiarían a regiones de ambas provincias no solo por el menor impacto ambiental, sino porque traería inversiones de ambos lados de la frontera”, indicó el ministro.
Pero de todos modos, insistió en que aún si se dan las condiciones requeridas por Misiones, se podría definir la convocatoria a un plebiscito, como ya anticipó el gobernador Maurice Closs.
“No se puede hacer futurología. El proyecto todavía no está definido. Cuando se conozca en detalle, lo analizaremos como Gobierno, con los intendentes, con los foros de energía y si vemos que no hay un consenso generalizado, se puede avanzar en una consulta más específica a la ciudadanía”, consideró.
Finalmente, sostuvo que la relación con la Nación no debería resquebrajarse por la postura de Misiones, ya que “siempre fue la misma y nunca se avaló otra idea”.

La nota que desató el enojo
La semana pasada Eletrobrás, el gigante energético brasileño anunció en una nota publicada en el diario El Cronista, que la inversión prevista es de 3.000 millones de dólares para la construcción de Garabí tenía financiamiento asegurado por el banco de inversión de Brasil. Sinval Zaidan Gama, vicepresidente de Bracier, un ente controlado por Eletrobras que también agrupa a otros operadores eléctricos de Brasil, dijo que “estamos completando los estudios de prefactibilidad, que estarán listos a finales de este año. Con eso en la mano, podremos determinar la mejor ubicación del proyecto”, explica. “Eso ya tiene un cronograma y está en marcha. Avanzar con esta iniciativa es una decisión firme que ya tomaron los gobiernos argentino y brasileño”, sostuvo el ejecutivo. En cambio, en Misiones objetaron el apuro brasileño, ya que en la práctica, recién en septiembre se conocerá el primer informe sobre el estudio de inventario -conocer la realidad del río- para después avanzar con un estudio de prefactibilidad.