El geólogo Enrique Schnack estudia la evolución de las costas en relación al cambio del nivel del mar que se ha producido en los últimos miles de años. También los procesos que afectan a las costas en la actualidad, como la erosión o el aumento del nivel del mar, así como las tormentas y sus impactos.
Sobre la situación actual de la Costa Atlántica bonaerense, el profesor de la UNLP e investigador de la CIC señaló que está expuesta a muchos problemas, en parte debido al cambio climático global que implica un aumento del nivel del mar.
“Según escenarios planteados por el Panel Intergubernamental para el Cambio Climático, el nivel del mar llegaría a fines de siglo a subir entre 10 y 90 centímetros. Hay otros estudios a nivel mundial que hablan de 30 centímetros. En Argentina, el crecimiento es aproximadamente de 1,5 milímetros por año”, explicó el científico.
El aumento del nivel del mar se debe fundamentalmente a la fusión de hielos asentados en tierra. A Groenlandia se le atribuye la mayor contribución y un poco menos a la Antártida. Otro motivo es el calentamiento propio del océano, que causa un fenómeno llamado expansión térmica.
El hombre, por su parte, también es responsable del deterioro de las costas. A través de la explotación de las arenas para construir y de las edificaciones costeras y, en general, por la inadecuada gestión de los procesos costeros, indicó Schnack.
Según el investigador, en el Partido de la Costa los lugares más críticos en la actualidad son Santa Teresita, Mar del Tuyú, San Bernardo, Mar de Ajó y Las Toninas. En estos lugares, así como en otros como Villa Gesell y a nivel provincial se están desarrollando iniciativas para la aplicación de buenas prácticas de manejo costero.
Entre las soluciones posibles para retardar la erosión de las costas, la tendencia actual es tomar medidas denominadas “blandas”. “Se inyectan arenas en las playas tomadas del fondo marino. Esta inyección se llama refulado. Se saca arena con dragas del fondo marino y se traslada a la playa”, indicó.
Mencionó que otra alternativa es no construir en la costa o derribar lo que está edificado, como ocurre en otras partes del mundo.
|
|
|