Tras digerir, al menos en parte, el desconcierto que generó la información del Ente Nacional de Obras Hídricas y Saneamiento Ambiental (ENOHSA) sobre la casi finalización de la obra de red cloacal y agua potable en Andalgalá -y ante la realidad que dice lo contrario- los vecinos comenzaron a reunir evidencia que planean remitir al ente nacional.
Según informó Luis Gribaudo, uno de los vecinos molestos por el caos que generó la mega-obra hídrica encarada en Andalgalá y cofinanciada por ENOHSA y el municipio, con la respuesta del organismo nacional en mano, los vecinos acordaron el sábado recoger la evidencia –fundamentalmente mediante registro fotográfico- para que el ente oficial pueda contrastar que el avance de obras que aseguran tener certificado en papeles no se condice con la realidad.
La obra incluye la construcción de la red cloacal y de agua potable, más la planta de tratamiento de líquidos cloacales y la planta potabilizadora. Según la última información ya se invirtieron en este proyecto más de 30 millones de pesos.
El malestar entre los vecinos es de vieja data y se debe a que la obra supuso la apertura de zanjas en gran parte de las calles de la ciudad y porque se habría realizado sin una planificación estratégica para evitar el caos vehicular.
A raíz de esto, los vecinos intimaron al municipio, al Ministerio de Obras Públicas y al ENOHSA para que informen sobre el estado de avance de la obra y su plazo de finalización. La sorpresa fue cuando, la semana pasada, el ente hídrico aseguró haber constatado “un avance real del 99,7% de las obras de redes colectoras de cloacas y un 92% en lo que hace a las redes de distribuidoras de agua potable”, una respuesta que, aseguran los andalgalenses, nada tiene que ver con las zanjas abiertas y las calles intransitables que padecen diariamente.
|
|
|