La presencia de aguas servidas durante días a lo largo de la calle Presbítero Biggio generó indignación y críticas de los vecinos, frente a lo que consideran inacción por parte de ABSA y del Estado.
Según informó la firma prestataria, el desborde de los líquidos cloacales se debió a un taponamiento de la red generada por residuos domiciliarios, en tramos de la cañería que se ubica por debajo de la citada arteria.
Los trabajos de desobstrucción terminarán hoy, por lo que no deberían continuar los desbordes.
En la esquina de Biggio y Castelli, Elsa Gómez comentó que personal de ABSA se ha acercado al menos en tres oportunidades al lugar, pero no ha solucionado el inconveniente.
"Sabemos que el problema volverá. Esto es un foco infeccioso terrible. En estos momentos, se puede decir que el caudal es mínimo, porque esta esquina suele estar de bote a bote.
"Por la presión del líquido se levanta la tapa de las cloacas y a esto se suma la basura que tira la gente. Ya no sé qué hacer, porque el problema está apareciendo muy seguido", expresó la vecina.
Matías Ramadori, domiciliado en Castelli 2900, aseguró que el curso de agua servida lleva un mes, pero aclaró que no es la primera vez que aparece este problema.
"En esta esquina se nota mucho más la presencia de líquidos cloacales porque está asfaltada y nada los absorbe; es más, los vehículos lo desparraman cada vez que pasan y los propios autos o las mismas personas en sus zapatos los ingresan involuntariamente a sus domicilios. De tal manera, los olores son nauseabundos y no permite ventilar la casa", expresó Ramadori.

Rotura de una cañería
Como consecuencia de la rotura de una cañería principal de agua potable, producida por la empresa Málaga Construcciones durante trabajos de excavación en la esquina de Don Bosco y Avenida Buenos Aires, se debió interrumpir la prestación del vital servicio, durante la tarde de ayer, en los barrios Vista Alegre, 1 de Mayo, Villa Nocito y Maldonado.