Durante el fin de semana largo pasado, los vecinos que habitan el country La Rufina volvieron a quejarse por la falta de agua y se mostraron inquietos porque avizoran un futuro incierto respecto al suministro regular del servicio cuando aumenten las temperaturas y se incremente el consumo.
Los pobladores del country volvieron a reclamar a las autoridades del predio, al municipio y a los responsables de la cooperativa de agua de La Calera que se normalice el servicio que se presta manera irregular desde hace más de dos años.
Desde la cooperativa se viene aclarando que la situación de emergencia hídrica afecta a toda la ciudad, y que hasta que no esté concluida la obra de ampliación y remodelación de la planta potabilizadora de La Calera, los inconvenientes con el suministro se sostendrán.
Sin embargo, los pobladores de La Rufina acentuaron su molestia con amenazas de cortar la ruta hacia Córdoba para reclamar por una solución definitiva para la falta de agua apenas suben las temperaturas, o iniciar acciones legales ante los responsables del suministro.
El intendente de La Calera, Juan Domingo Etchepare, aclaró que desde el municipio comenzaron a evaluar alternativas para avanzar en un proyecto de mejoramiento del servicio que podría derivar en el cambio del prestador del servicio.
“Es evidente que no estamos conformes con la manera en que se presta el servicio, la ciudad merece que haya inversiones, cambios y planes que se adapten al crecimiento que estamos experimentando”, agregó Etchepare.
Este anuncio abonaría la posibilidad de que Aguas Cordobesas pudiera ingresar como prestataria del servicio de agua potable en toda la ciudad.