El ministro de Ambiente, Julio Nasser, explicó que, según estudios realizados, el trayecto que impulsa Jujuy podría impactar negativamente en la Vega de Socaimán, el principal reservorio de agua del área.
Esto afectaría el abastecimiento de agua de San Antonio de los Cobres y los parajes aledaños, además de la biodiversidad de la zona. en ese sentido, se comprometió a pedirle a Vialidad Nacional el informe de impacto ambiental en el que se absaron para aprobar el proyecto jujeño.
Mientras tanto, la Secretaría de Recursos Hídricos sigue estudiando los acuíferos de la zona para encontrar una fuente de agua alternativa. Se sabe que el agua que toman en Los Andes tiene un alto contenido de boro y arsénico.