Una familia denunció que operarios de la empresa minera Andacollo Gold virtieron desechos sobre el arroyo Huaraco, lo que provoca serios trastornos para la familia Fonseca, cuya vivienda está ubicada a poco más de 400 metros de la empresa y a escasos kilómetros de Andacollo.
“Cuando nos levantamos encontramos a los residuos de la minera corriendo por el patio de la casa. La diferencia con los derrames anteriores fue que esta vez los agarramos justo. Generalmente los tiran a la noche y a la mañana cuando lo descubrimos ya limpiaron todo. Esta vez mi hermano los encontró, por lo que pudimos filmar y tomar fotos de la situación”, explicó Cristóbal Fonseca, uno de los damnificados.

Desechos
“Es evidente que el derrame existió. Es la segunda vez que los atrapamos in fraganti contaminando las aguas del arroyo. Esto va a tener un tratamiento inmediato en el Concejo Deliberante para que se tomen cartas en el asunto”, asintió el concejal por la Concertación en Andacollo, Jorge Ortega.
“Tiraron todos sus desechos, sus desperdicios. Además, a esto hay que agregarle el combustible de las máquinas y los explosivos de las máquinas que usan para perforar”, agregó Cristóbal.
La familia Fonseca viene denunciando sistemáticamente a la empresa, que respondió a los reclamos ofreciendo agua mineral para la familia y agua para el riego de la chacra. Desde 2007, el reclamo corre por la vía legal. Sin embargo, la familia asegura que la única solución es que exista una reubicación. El paraje Huaraco (agua amarga en lenguaje mapuche) se encuentra a la vera de la ruta que une las localidades de Andacollo y Huinganco, a orillas del río Neuquén.

Enojos
Ayer, al detectar la contaminación, el abogado de la familia se acercó al lugar junto con un escribano público para constatar lo que había pasado. “Mi hermano recibió agresiones verbales. Nunca había pasado esto. Lo canchereaban y le decían que nosotros no podemos pedirles que limpien. No le vamos a imponer nada porque para eso está la Policía minera”, aseguró Cristóbal Fonseca.
Ayer por la tarde, se reunieron representantes de la empresa, del gobierno provincial, de la Policía minera y también de la familia. Según aseguró Fonseca, la empresa volvió a ofrecerles agua mineral para el consumo y agua para riego. “Ellos reconocieron lo que pasó y nos dijeron que se tapó una cañería con un plástico. Nos dicen que nos van a limpiar los canales pero nunca solucionan nada”, explicó Cristóbal Fonseca.
Este diario intentó ayer comunicarse con la empresa minera, aunque no se pudo obtener una respuesta por parte de las autoridades de la empresa.