María Gabriela Pascucci tiene 44 años y dos hijos. Sube y baja las escaleras con un balde en cada mano hasta el segundo piso del monobloque 22 del barrio Fonavi. Dice que hace seis días que no tiene una gota de agua en el departamento (segundo "A") que ocupa desde que tenía 16 años.
"Estoy segura de que si el personal ABSA llega con sus grandes llaves y abre la válvula que está en Castelli y Fabián González, frente a la escuela Nº 48, volveremos a tener agua como antes", dice mientras recupera fuerzas para continuar su peregrinaje por los peldaños.
El hilo de agua que llega al complejo habitacional del barrio Estomba es "exclusividad" de quienes viven en la planta baja. Allí, muchas de las 492 familias, cada vez más acostumbradas a este tipo de problema, hace una semana que sufren la escasez, en algunos segmentos, total.
Las consecuencias alcanzan a la salita médica comunal que funciona en Viamonte al 2.800, donde se cubren las necesidades de unos 13 mil habitantes de la zona norte. El Fonavi, ubicado entre Castelli, Biggio, Esquiú y Terrada, padeció la misma situación en noviembre del año pasado.
Presión insuficiente desde Aguas Bonaerenses (ABSA), motores arruinados que impiden el bombeo a la cisterna que abastece al sector, falta de recursos económicos para la reparación y expensas que no todos pagan resultan los extremos del caso que se argumentan.
"Estamos de mal en peor. Nos quedamos sin agua a principios de mes porque se rompió una bomba que alimenta la cisterna del complejo. Los administradores explican que los motores de funden porque la cisterna trabaja sin agua por la poca presión que envía ABSA", indicó ayer la secretaria de la sociedad de fomento, Mónica Gavilani, quien habita un dúplex situado en Terrada y Fabián González.
Los vecinos se arreglan como pueden. La emergencia reactualizó el valor de la paciencia y, sobre todo, de los baldes.
"En los monobloques no hay una gota y lo que se consigue en la planta baja hay que llevarlo hasta los baños. Por eso hay que tratar de que se repare el motor, porque el que queda en funcionamiento está sobrecargado. También hay que establecer de quiénes son las responsabilidades", agregó la fomentista.
Gavilani explicó que se pagan expensas que van de los 15 a los 25 pesos y que bimestralmente hay que abonar más de 3.500 pesos para el mantenimiento de la cisterna. Además, como no hay medidores individuales, ABSA estableció una tarifa común de 60 pesos para todas las familias.
"Planteamos el tema, porque esos 60 pesos los tienen que pagar desde el que vive solo hasta una familia numerosa. De todos modos, no cumplir con las expensas es gravísimo, porque los administradores nos dicen que no hay plata para pagar los arreglos y eso nos afecta a todos".
Anoche, ante la consulta de este diario, desde la oficina central de ABSA, en La Plata, se aseguró que el conflicto tiene su origen en cuestiones internadas relacionadas con la administración del barrio.
Cortes previstos.
Por la instalación de dos bocas de toma en Los Tamariscos y Bouchard, ABSA interrumpirá el servicio de agua potable hoy, de 9 a 16, en los barrios Austral, El Oasis, 12 de Octubre, Plan Federal II, San Miguel, El Polo, Grünbein, villas Gloria y Elena, ex seminario La Asunción, y las plantas de Coca Cola, Nutregal y Argensoja.
También hoy está anunciado el empalme de nuevas cañerías entre las calles Gambartes y Pilcaniyén, Gambartes y Salinas Chicas, Monseñor de Andrea y Salinas Chicas, Marcos Mora y Bullrich de Villa Harding Green.
Los trabajaron, ejecutados por la Municipalidad en el marco del programa "Aguas + trabajo", determinarán el corte de agua, de 8 a 14, en el tramo delimitado por Malharro, Araucanos, Agote, San José, Spilimbergo, ésta última, entre Pilcaniyén y Mora; Mora, de Spilimbergo a Bullrich y salinas Chicas, entre Bullrich y Molinas Campos.
Mayores informes en la línea telefónica gratuita 0800-800-ABSA (2272). |
|
|