"La emergencia hídrica en nuestra localidad ha llegado a límites peligrosos. La reserva de agua sólo alcanza para 60 días más". Así de simple y contundente es el comunicado que recibieron los vecinos de Capilla del Monte de parte del Ente Municipal de Obras y Servicios de Saneamiento (Emoss).
La razón es una sola: por la sequía reinante, el agua del dique Los Alazanes, de donde se extrae el agua que se distribuye en esta ciudad de 11 mil habitantes, está en su nivel más bajo. Y ante la falta de lluvias, por el consumo para la red y la evaporación natural, cada día se reduce más.
Un dato basta para dar cuenta de esa bajante: según mediciones del Emoss, el volumen del embalse al 4 de agosto era de 196 mil metros cúbicos, que en sólo 20 días descendió a 158 mil y que siguió bajando a 147 mil al 31 de agosto. Por estos días, llega a 137 mil metros cúbicos (que representan 137.000.000 litros de agua).
En apenas un mes, el pequeño lago del norte de Punilla perdió un 30 por ciento de su volumen.
A ese preocupante diagnóstico, que sería sólo reversible con abundantes lluvias, se suma otro factor, ligado a la degradación ambiental: por efecto de los incendios en los últimos años en la zona, que generan que las cenizas y restos de la deforestación producida sean arrastrados hasta el lago, los sedimentos han aumentado considerablemente.
"De los 137 mil metros cúbicos de volumen actual, unos 37 mil serían de barro sedimentado por los incendios y la deforestación. Por lo tanto, quedarían en realidad 100 mil metros cúbicos de agua disponible. Esa cifra, dividida por los 1.613 metros de consumo diario de Capilla del Monte, nos estaría dando una existencia de reserva de agua solamente para 60 días", señaló a este diario Daniel Guzmán, del Emoss.
Guzmán citó que ante esta situación, además de dictarse la emergencia hídrica y exigir a los vecinos que reduzcan el consumo, se aportará al sistema agua adicional desde la planta ubicada en el dique El Cajón, que es de escasa capacidad, para la zona central de la ciudad. De ese modo, la reserva de agua podría extenderse a unos 90 días.

No derrochar. "Los Alazanes está hoy 5,21 metros por debajo de su nivel. La mayor bajante que se recuerde se dio en diciembre de 2007, con 6,20 metros, pero ese año a esta altura, en setiembre, el nivel era superior al actual, por lo que si no llueve bien en las próximas semanas, podríamos llegar al nivel más bajo que se haya registrado", señaló Guzmán.
El municipio, en tanto, inició una campaña de mayor control y sancionó varias multas por derroches de agua en este contexto. Está prohibido por ejemplo el llenado de piletas, lavado de vehículos o de veredas, y otras acciones similares. En emergencia, el agua de red sólo debe ser usada para consumo e higiene personal.
En Capilla del Monte el control se torna más complejo porque sólo 900 de los cinco mil usuarios tiene medidores domiciliarios de consumo de agua.

Otros casos
Un mal de muchos en la provincia
La sequía está afectando a un amplio espectro de la provincia. En La Batea, un pequeño poblado de Cruz del Eje, la falta de alimentos y agua ha matado miles de cabras. Villa Carlos Paz analiza declarar el alerta naranja. En Alta Gracia ya declararon la emergencia hídrica. En Salsipuedes se agravó en estos días un problema crónico. Y el dique La Quebrada, casi vacío, tiene en vilo a Mendiolaza, Unquillo y Río Ceballos.