Amplios sectores de la Ciudad se quedaron ayer sin agua durante horas por la rotura de un conducto ubicado en las inmediaciones del parque Saavedra. Miles de familias sufrieron cerca del mediodía las consecuencias de no contar con el vital líquido, y descargaron su enojo con Aguas Bonaerenses, más precisamente con su sistema de atención al usuario que se describió como "exasperante".
Los barrios afectados estuvieron al este y sur del casco urbano platense, en las inmediaciones de la plaza España, la antigua estación del Ferrocarril Provincial al Meridiano V y el parque Lisandro de La Torre (sector enrejado del Saavedra).
"Me quedé sin agua bien temprano a la mañana; ni una gota, diferente a otras veces que hubo baja presión" contó Hebe Restelli, de 70 entre 18 y 19: "es la primera vez que pasa esto, y nadie sabe explicar el motivo; si es por una obra, deberían avisar antes". Desde 14 y 69, Sebastián Romiglia apuntó que "es prácticamente imposible comunicarse con el 0-800 de ABSA, y encima cuando lográs hablar con alguna persona te dice como si nada que 'por ahí sigue igual el corte todo el día'".
Oscar Martínez, de 66 entre 10 y 11, precisó que en esta zona el corte se hizo notar bastante antes de las 11; entre las 10 y las 10 y media, dejó de salir una gota de las canillas abiertas al máximo. Hacer el reclamo en ABSA es realmente desesperante, te ponen esa musiquita interminable y no aparece un ser humano ni por casualidad. El agua es un servicio esencial y si se corta totalmente hay que informar por cuánto para que la gente pueda hacer las previsiones del caso".
Desde la empresa que ofrece los servicios de agua corriente y cloacas se explicó que los inconvenientes fueron consecuencia de una reparación en instalaciones de 13 y 69, ubicadas frente al colegio Padre Castañeda.
"Estaba pautado como un trabajo de rutina, pero se detectaron otras fallas en las cañerías y se resolvió cortar el suministro por seguridad ante la proximidad de la estación de bombeo del Parque" señalaron los voceros: "de todos modos, la cuadrilla empezó a las 11, y minutos después de las 13 comenzó a retornar la presión al tendido; no fueron más de dos horas".
Mientras tanto, exactamente en la esquina oeste de de 13 y 69, sobre la vereda pero junto al cordón, un pozo de considerable profundidad quedó abierto, rodeado por montículos de tierra y parcialmente cercado con precarias vallas de madera unidas por cintas plásticas. |
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