La Picacita, el canal de riego de Picún Leufú, ya no puede asistir las hectáreas en producción de la localidad. El reclamo llegó a la Legislatura de la mano del consorcio de riego de la localidad, donde un grupo de productores denunció privilegios de parte del gobierno hacia empresas agrícolas que ocupan la mayor parte de las tierras bajo riego.
El canal asiste a cerca de 1.400 hectáreas, pero según las asociaciones que el martes expusieron la problemática en la comisión de Producción de la Legislatura, "resulta insuficiente". "Falta mantenimiento en los drenajes y canales, lo que se traduce en un mal aprovechamiento del agua", se indicó en la reunión.
También se adjudicó al gobierno provincial tener dos posturas diferentes, según se trate de productores pequeños o de grandes empresas quien realice cualquier reclamo. "No pagan el canon de 50 pesos por hectárea que corresponde por el riego y lo utilizan sin limitaciones, además de que accedieron rápidamente a la titularidad de la tierra", remarcaron en el encuentro.
El presidente de la comisión, Eduardo Benítez (UCR), usó el caso como "muestra de la poca atención que le presta el gobierno provincial a pequeños productores, priorizando la asistencia a grandes inversionistas que gozan de todo tipo de privilegios". Agregó que el caso de Picún Leufú "demuestra que todo lo hecho en nombre de diversificar la economía ha sido un rotundo fracaso".
El proyecto del canal La Picacita -una versión disminuida del original, denominado La Picaza- demoró 40 años en realizarse. Se inauguró en 1998, con un costo de construcción de ocho millones de dólares como parte del programa Neuquén 2020 del gobierno de Felipe Sapag.