La firma se instaló en la zona en 1982 para producir carbón de coque. Y los vecinos habían entablado la demanda hace 18 años, pero la empresa cuestionada interpuso sucesivos recursos, mientras -según señaló el fallo- “la contaminación continúa hasta la actualidad”.
Con su fallo, la Corte sentó parámetros singulares, pues si bien en otras oportunidades había dispuesto indemnizaciones, nunca había sentado jurisprudencia sobre la prescripción en función de la información con que contara la víctima.
En este sentido, Copetro había recurrido a la Corte sosteniendo que el reclamo había prescripto por haber transcurrido más de dos años desde el origen de los daños, en 1982, y la interposición de la demanda, en 1992. El caso es una muestra de la indefensión en que se encuentran los vecinos del Gran La Plata antes la contaminación reinante. Casi dos décadas luchando ante la Justicia, cuando todos los estudios confirman la grave polución del ambiente.
Otros casos
A principios de este año, la Fundación Biosfera denunció un derrame de nafta en calle Falucho y el canal Oeste. La empresa retiró el combustible y tiró tierra en el lugar, dijo a Hoy Horacio Beláustegui, advirtiendo que esos no son los pasos a seguir, que no se hicieron más intervenciones, y que en las reuniones entre la empresa y los vecinos Repsol-YPF no quería que participaran las organizaciones denunciantes.
En otro caso reciente, una ONG denunció que una planta de asfalto de Repsol-YPF estaba emitiendo gases tóxicos que serían “cancerígenos”.
Afirmaron entonces que la Provincia “no realiza controles” y que “los monitoreos los hace la propia compañía”.