En la Comunidad Aborígen de San Juan de Quillaques, se reunieron las autoridades originarias del pueblo Atacama; membros del Foro de Agricultura Familiar; auoridades del Gobierno Provincial, Municipal y de la Sub Secretaría de Desarrollo Rural y Agricultura Familiar de la Nación, para abordar la problemática hídrica en el Departamento Susques y aprobar los primeros proyectos de agua para la zona rural, en el marco del programa de desarrollo Atacameño “Likan Tulva Puri” (Agua para el Pueblo y el campo).
Con la primera luz del día, llegaron los dirigentes de las comunidades, equipos aguateros, productores y funcionarios, congregándose en la apacheta de la comunidad, para pedirle permiso y energía a la Pachamama para alcanzar acuerdos.
En el Salón Comunitario se desarrolló ordenadamente las deliberaciones “como un verdadero ejemplo de ejercicio de democracia participativa” -según un joven estudiante- y el equipo técnico presentó los proyectos por comunidad. Los aguateros de Susques exhibieron un documental con datos estadísticos; resltados de cantidad y calidad de agua; prodctores beneficiarios y trabajo de campo para localizar las obras.
Por su parte, el ingeniero Marcelo Echenique, delegado en Jujuy de la Sub Secretaría de Desarrollo Rural y Agricultura Familiar, anunció públicamente que dicha repartición aportaría para la primera etapa de los proyectos, la suma de $ 350.000 destinada a la adquisición de materiales; mientas que la mano de obra correrá por cuenta de las comunidades. Además, dada la importancia de los resultados alcanzados, las autoridades presentes decidieron, por intermedio de Legislatura, plantear que la iniciativa fuese declarada ‘de Interés Provincial’.
Las comunidades aborígenes (Susques, Huancar, Pastos Chicos, Puesto Sey, Catua, Olaroz Chico, El Toro, Coranzulí y San Juan de Quillaques) coincidieron al plantear que “todo comenzó a mediados de 2008 al conocerse los resultados del SUNIBRON -dependiente del Ministerio de Salud de la Provincia-, sobre la presencia de altos porcentajes de arsénico y boro en varias fuentes de agua de la zona, por lo que los atacameños comenzaron a reunirse para estudiar las estrategias tendiente a resolver la problemática mediante un trabajo participativo y coordinado entre dirigentes, productores y distintas áreas de Gobierno”.
Primero se conformó un equipo técnico con profesionales a cargo de la Sub Secretaría de Desarrollo Rural y Agricultura Familiar; luego e capacitó a los equipos aguateros -integrados por miembros de cada comunidad- en la toma de muestras y aforos para determinar la calidad y cantidad de agua existente en cada región, todo evaluado en las asambleas realizadas en cada comunidad.
Con los croquis, el estudio de las aguas y la actualización de los censos poblacionales y ganaderos se priorizó proyectos cuyo financiamiento estará a cargo de dicha repartición.
Al respecto, los comuneros atacameños René Calpanchay y Cosme Damián Soriano, coincidieron en que “ante un panorama que parecía oscuro, en menos de un año vimos la luz que nos mostró el agua para nuestro pueblo, por eso estamos conformes con la reunión que mantuvimos con las autoridades del Gobierno Municipal, Provincial y Nacional, para coordinar acciones y hacer realidad el sueño colectivo de las comunidades atacameñas y poder transformar responsablemente el anhelo de éstas en políticas públicas.”
También estuvieron el secretario del Interior, Hugo Echavarri; el diretor Provincial de Desarrollo Ganadero, Mario González Diez; el delegdo de Región III, Rufino Lizárraga; el responable del Programa de Relevamiento Territorial para Comunidades Indígenas, Hector Nicolás; el equipo e Asesoría Legal de la Secretaría de Derechos Humanos; el presidene de la Comisión de Ecología, diputado Pablo Baca y los comisionados municipales de Susques y Coranzulí, Timoteo Puca y José Ramos.