Tras solo tres años y medio de haberse construido, la planta potabilizadora Rufina Alfaro, ubicada en la región mesoriental de Azuero, una de las obras insignia del gobierno del presidente Martín Torrijos en el interior del país, ya se encuentra deteriorada.
La obra fue construida y diseñada por la empresa Ininco, S.A. a un costo de 7 millones 882 mil dólares.
Una enorme cantidad de defectos y daños presenta la planta, como por ejemplo, mala construcción, mala selección de equipos, así como defectos de instalación.
Lo anterior está contenido en la nota No. 930 de 29 de abril de 2008, que el estonces director del Instituto de Acueductos y Alcantarillados Nacionales (Idaan) Juan Antonio Ducruet, le envió al gerente general de la empresa Ininco, S.A., Juan Carlos González.
La empresa en mención ejecutó el contrato 513-2002 de diseño y construcción del citado proyecto, inaugurado el 23 de febrero de 2006 por el entonces presidente de la República Martín Torrijos.
La citada nota indica que todo esto resulta en una deficiente operación de la toma de la planta, de la línea de conducción a Las Tablas y acelerado deterioro de todo el sistema. Al final resulta que no es posible brindar un servicio seguro y permanente de suministro de agua a las comunidades de cobertura de esta planta.
“En esta circunstancia, dice Ducruet, la presente nota es portadora de una formal queja ante ustedes (Ininco)”, al tiempo que solicitó proceder a corregir todos los defectos existentes.
Por su parte, Juan Carlos González, gerente general de Ininco, S.A., aseguró que la empresa respondió oportunamente cada una de las recomendaciones de Ducruet.
“Cumplimos con todo lo que planteó el contrato y entregamos la obra a satisfacción del Idaan y la Contraloría dio su visto bueno”, aseguró González.
González dijo que el deterioro de la planta se debe a que no se le da el mantenimiento oportuno y debido. “Nosotros entrenamos al personal técnico adecuado para manejar la planta y para administrar los químicos y después los destituyeron”, explicó.
Aseguró que Ininco reemplazó varios equipos dañados. Una muestra fue el manejo de la toma de agua en el río. Sin embargo, sobre lo que aún no se ha reparado, González afirmó que “a estas alturas ya no se puede hacer nada, porque ya se venció la garantía y la fianza de cumplimiento que contempló el contrato”.
Un rosario de errores
El Idaan reclama al contratista subsanar diferentes problemas en la toma de agua cruda y en las turbinas verticales, que han presentado problemas de abrasión, vibración y de operación.
La planta requiere elevar la posición de la viga de tecle, usada en tareas de mantenimiento de las turbinas, a una altura que permita el paso franco de tramos de 10 pies de tubería.
Se necesita reemplazar los tubos de bajada,-actualmente con conexiones roscadas.
También el canal de agua cruda encontró problemas, por lo que es necesario instalar compuertas laterales en los extremos del canal para efecto de limpieza.
En los floculadores existe un grave problema de diseño reflejado en la muy baja velocidad del agua, lo cual da lugar a fenómenos de sedimentación.
Otra sección de la planta donde el Idaan encontró deficiencias fue en los sedimentadores. La operación eficiente de estos depende del sistema de eliminación de lodo. Este no funciona, indica la nota 930, debido a que el contratista no instaló las válvulas automáticas requeridas para las descargas sincronizadas de lodo y además, porque no ha sido programado el tiempo de recorrido y evacuación de lodo.
En la nota, afirma Ducruet, es necesario instalar un sistema auxiliar para limpieza adicional de lodo acumulado, con ayuda de agua a presión, procedente de una bomba auxiliar y red de tuberías con salidas para mangueras.
El control y operación de los filtros se realiza con válvulas de mariposa operadas por cilindros neumáticos. Todos estos operadores están desprotegidos y a la intemperie y muestran ya signos de corrosión y daños severos.
Se requiere una rehabilitación integral y exhaustiva de todas las válvulas de los filtros, incluyendo montaje, cierre hermético, alineamiento de ejes, reemplazo de ejes y reemplazo de operadores neumáticos.
En muchos puntos de la planta, pero mayormente en los filtros, existen grietas y fisuras en las paredes, que tienen que ser reparadas.
Con relación a la tubería de conducción La Villa-Guararé-Las Tablas, la desviación con múltiples codos simultáneos a la altura de Guararé produce una perdida de presión y tiene que ser corregida mediante una desviación simple.
Consultado sobre las reclamaciones que hizo a la empresa, Juan Antonio Ducruet señaló que si bien se hicieron reclamos puntuales a Ininco, por deficiencias de construcción, la aseguradora los atendió. Sin embargo, a Ininco, S.A. no se le pueden achacar todos los problemas operativos de la planta, ya que también el Idaan aplicó un mantenimiento deficiente debido a la falta de presupuesto.
La planta, consideró Ducruet, no se ha perdido, está funcionando, pero hay que hacerle una serie de inversiones para introducirle mejoras. Además, debe considerarse que la población está creciendo y la demanda aumenta.
La vocera del actual director del Idaan, Thabannie Beitía, dijo que se le dará seguimiento a las anomalías reportadas y se hará una investigación.
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