La Cámara Nacional de Casación Penal ratificó recientemente en un fallo, la condena contra el ex intendente de la ciudad tucumana de Concepción, Octavio Muedra, hallado responsable de la contaminación que provocó un basural a cielo abierto en la cuenca Salí Dulce. En la misma resolución, el órgano judicial ordenó la apertura de una investigación en contra de quien por entonces se desempeñaba como titular de la Dirección de Medio Ambiente, Patricia Jalil de Arriazu.
Muedra fue condenado a un año de prisión condicional e inhabilitado por igual tiempo a ejercer cargos públicos. En lo que fue el primer juicio ambiental en la vecina provincia de Tucumán, en noviembre de 2007 el Tribunal Oral Federal lo declaró responsable de la contaminación provocada por el basural que contenía residuos patógenos, una clara violación a la Ley Nacional de Residuos Peligrosos.
La medida había sido apelada y llegó a Casación Penal que decidió ratificar el castigo contra el ex funcionario tucumano, pero además y por la gravedad del hecho, ordenar que se abriera una investigación en contra de Patricia Jalil de Arriazu, ex directora de Medio Ambiente.
El basural está ubicado a la vera del río Gastona y las autoridades judiciales federales determinaron que contaminó la cuenca Salí-Dulce, por lo resolvieron que la causa era competencia de la Justicia Federal.
El caso se inició con la denuncia de vecinos de Concepción ante el fiscal federal Gustavo Gómez, quien ordenó las actuaciones preliminares, entre ellas un estudio por parte de Gendarmería, que encontró residuos patológicos dentro del basurero. Por este mismo hecho, el actual intendente, Osvaldo Morelli, fue imputado por el juez federal de Tucumán, Mario Racedo. Morelli ya prestó declaración ante el magistrado y debe esperar por la resolución para saber si quedará procesado o no.
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