El secretario de Salud, Gustavo Klein, informó ayer que los resultados de los análisis del agua de la cisterna que provee al jardín de infantes de la Escuela “Dr. Raúl G. Villafañe” determinaron que es apta para el consumo humano.
“Nosotros tomamos las muestras tanto de la escuela como del jardín y podemos decir que el agua es apta para el consumo de los niños y que no tiene ningún tipo de problema”, afirmó el funcionario.
Klein agradeció la preocupación de los padres respecto a la calidad del agua. “Evidentemente a todos los padres nos preocupa el hecho de tener a nuestros hijos yendo a escuelas u otro lugar donde corran algún riesgo relacionado con su salud”, admitió Klein.
El colaborador del intendente Martín Llaryora explicó luego que el análisis bacteriológico determinó que no existen microorganismos que puedan afectar la salud de quienes consumen esa agua.
“Nosotros hacemos controles del agua tres veces por semana en diferentes lugares de la ciudad, por lo que en el mes recorremos todas las escuelas de la ciudad”, apuntó el titular del área de Salud.
Gustavo Klein indicó que se logró dividir el problema determinando que quien debe intervenir es la Secretaría de Infraestructura de la Provincia, que tomó cartas en el asunto al estar vigente el plazo de garantía de un año que establece el contrato con la empresa constructora.
Precisamente, las autoridades provinciales deberán resolver cuestiones referidas a las falencias detectadas en la obra, vinculadas al ya citado problema del agua y también en la instalación eléctrica del establecimiento. Según indicaron autoridades educacionales, se debe resolver el cambio de parte de la cañería que provee de agua a la cisterna ya que se observa la presencia de placas de material semejante al óxido, que inicialmente hicieron sospechar de la contaminación.
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