Luego de las denuncias realizadas por el defensor del Pueblo, Juan José Dutto, sobre la contaminación en los cursos de agua, desde el municipio de esta ciudad se anunció que se comenzará a trabajar en el saneamiento de los arroyos y canales, tanto a cielo abierto como entubados, que desembocan en el río Limay.
La decisión que se tomó fue comenzar por el arroyo Bejarano desde la Ruta 22 hacia la zona del río “que es el que más contaminación por coliformes tiene el agua”, explicó Julián Villar, subsecretario de Servicios Urbanos y afirmó: “Es uno de los puntos estratégicos porque además debemos trabajar en los cursos de agua secundarios y después en los principales, como Villa María y Durán”.
Además de los grados de contaminación mencionados por el funcionario, la contaminación en el arroyo Bejarano fue denunciada en varias oportunidades por los vecinos de la zona.
El saneamiento de Bejarano comenzará mañana y tardará unos 30 días. El trabajo se realizará en varias etapas. La primera será el proceso de inspección con el objetivo de detectar los focos de contaminación que en la mayoría de los casos se trata de desechos cloacales.
“Acá no sólo se labrarán actas municipales a los infractores, sino que también se podrían iniciar causas federales por contaminación de cursos de agua. En la medida que se detecten también habrá denuncias penales, a quien esté contaminando ya sean empresas, particulares, u organismos del Estado, vamos a actuar con el rigor de la ley, porque no sirve si sólo limpiamos, necesitamos que se tome conciencia”, expresó Villar.
El funcionario municipal detalló que luego de la inspección se realizará la limpieza gruesa, como escombros o todo lo que la gente tira al canal para deshacerse como heladeras, televisores, etc. En tercer lugar se realizará una limpieza más fina donde se retirarán las algas y plantas que no son funcionales al canal, y por último se llevará a cabo el tratamiento de las aguas y remediación del suelo.
Las tareas estarán a cargo de la empresa Proeco S.R.L y el tramo comprendido consiste en una extensión de 550 metros. “Van a completarse con el trabajo de los inspectores de Medio Ambiente y Servicios Urbanos, en la detección de quienes contaminan”, dijo el subsecretario.
Y destacó que el trabajo estará supervisado por la Defensoría del Pueblo porque “vamos a trabajar en conjunto con el defensor del Pueblo, tomando como base el estudio que presentó, y estamos invitando a que participe en esto la Provincia, a través de la Secretaría de Recursos Hídricos y el EPAS.
|
|
|