El ayuntamiento de Hermosillo advirtió que el 15 de enero se acabará el agua de la presa El Molinito, ubicada unos 30 kilómetros al oriente de la capital del estado, que abastecía cerca de 30 por ciento del agua potable de la ciudad. A partir del 16 de enero el servicio se ofrecerá únicamente durante ocho horas diarias.
En conferencia de prensa, José Luis Jardines Moreno, director de agua de Hermosillo, dijo que el consumo en la ciudad ha aumentado en meses recientes, pero las fuentes de abastecimiento han desaparecido. En 2008 fue necesario inyectar a la red de la ciudad un promedio diario de 233 mil metros cúbicos, y en 2009 se usaron en promedio 249 mil metros cúbicos al día.
“Tenemos que recurrir a esta medida (dotar de agua a la ciudad sólo ocho horas cada día), porque la gente está haciendo un consumo excesivo del agua. Parece que no acabamos de entender que estamos en una situación muy crítica”, indicó.
Según el ayuntamiento que encabeza el presidente municipal Javier Gándara Magaña, la reducción del suministro será indefinida, aun cuando se abrieran nuevos pozos de agua potable, que se sumarían a los 90 que, junto con la presa El Molinito, surten de agua a Hermosillo.
“Las restricciones en el abasto llegaron para quedarse (...) La demanda aumenta cada día y las fuentes disminuyen”, insistió.
En diciembre se dejó de suministrar agua potable entre las 10 de la noche y las cinco de la madrugada, pero esa medida resultó insuficiente para conservar las reservas, añadió Jardines Moreno.