Finalmente ayer se puso en funcionamiento la primera etapa de la obra que se realiza en la planta potabilizadora de La Calera. Se trata de la ampliación y remodelación de la ya existente, que permitirá proveer de agua potable a las Sierras Chicas. De esta manera, según la Provincia, La Calera, Saldán, Villa Allende, Mendiolaza y Unquillo tendrían asegurado el abastecimiento.
La unidad permitirá potabilizar un millón de litros de agua por hora, que se distribuirán hasta Unquillo y evitará la reducción de agua del dique La Quebrada, que abastece a las localidades de Río Ceballos, Mendiolaza y Unquillo. El embalse registra desde hace meses una bajante histórica, de la que no alcanza a recuperarse.
Hasta ayer la planta de La Calera producía 600 mil litros de agua por hora que se distribuían en esta ciudad, Saldán y Villa Allende. A partir de esta obra quedarán vinculados los sistemas de agua de La Calera y de La Quebrada con un nuevo acueducto de trasvasamiento que llevará agua a La Calera, Villa Allende, Mendiolaza y al 60 por ciento de Unquillo, las que hasta ayer se abastecían sólo del dique La Quebrada.
El agua del embalse sólo se utilizará ahora para la provisión de Río Ceballos y un sector de Unquillo. De esta manera, la obra permitirá regularizar el suministro del servicio de las poblaciones que hasta ahora sufren restricciones permanentes, lo cual impide el desarrollo de diferentes emprendimientos.
En el caso de La Calera, Saldán y Villa Allende padecen en los últimos años el régimen de suministro restringido durante 12 horas al día.
“Sin dudas que es una muy buena noticia porque en la situación crítica en que está el embalse La Quebrada, esta obra contribuirá a su recuperación”, expresó el presidente de la Cooperativa de agua de Unquillo y Mendiolaza, Raúl Hoya.
Agregó que, a pesar de estas acciones y la puesta en funcionamiento de otras obras complementarias pactadas con la Provincia semanas atrás, se mantendrán los cortes por 24 horas en las tres localidades, al menos hasta fin de enero.
Esas restricciones no involucran a los establecimientos turísticos (hoteles, cabañas, restaurantes y otros). En estos casos pueden llenar sus piletas, pero deben proveerse el agua de una fuente que no sea el dique.
La ampliación de la planta.
En el acto de ayer, el gobernador Juan Schiaretti adelantó que los trabajos de la segunda etapa de ampliación de la planta estará finalizada a fines de marzo. Cuando entré en pleno funcionamiento tendrá capacidad para potabilizar dos millones de litros de agua por hora.
La inversión provincial para esta obra asciende a unos 35 millones de pesos. Schiaretti ratificó la realización de obras complementarias, ya acordadas con los municipios, para generar más agua potable para esta zona. “Con esta fase concluida se proveerá del servicio a la población de Sierras Chicas, solucionando definitivamente el problema de la falta de agua”, prometió el gobernador.
La planta potabilizadora La Calera fue construida en la década de 1940 y ampliada en los años ‘70.
El crecimiento demográfico desmedido de estas localidades desnudó las falencias del viejo sistema de agua potable construido para atender a menos de 20 mil habitantes. Actualmente, sólo en La Calera, Saldan y Villa Allende viven más de 70 mil personas.
Alerta naranja
Pese a las últimas lluvias y a la crecida del río San Antonio, en Villa Carlos Paz continúa la alerta naranja. El dique San Roque se encuentra 6,20 metros por debajo del nivel del vertedero.
Reserva La Quebrada
Hoy se firmará un acuerdo entre la intendencia de Río Ceballos, la Secretaría de Ambiente de la Provincia y la Subsecretaría de Recursos Hídricos, por el cual esa Municipalidad asumirá el aprovechamiento integral de la reserva hídrica de La Quebrada y el tratamiento del perilago.
Permitirá que el municipio instrumente acciones de cuidado ambiental, y de prevención de accidentes. También posibilitará que la Comuna licite las áreas para los paradores y emprendimientos comerciales .
El acuerdo se suscribirá a las 11 en la Secretaría de Ambiente.
13,08 metros
La peor bajante de la historia. El dique La Quebrada se encuentra 13,08 metros por debajo del nivel del vertedero.
El récord se había producido en marzo de 2005, con 9,45 metros por debajo de su nivel.
Siguen los cortes
24 horas sin agua. Continuará el cronograma de cortes por 24 horas en las localidades de las Sierras Chicas. Serán dos días por semana, hasta fines de enero. Ayer no hubo agua en Río Ceballos; hoy se corta el servicio en Unquillo y Mendiolaza. Mañana habrá una reunión del comité de emergencia regional, que definirá los pasos a seguir.
Consumo diario por persona. Río Ceballos, Unquillo y Mendiolaza tienen más del 90 por ciento del sistema con medidores domiciliarios. Se consume entre 200 y 220 litros diarios por persona los días calurosos.
Por qué La Quebrada no sube su nivel
A pesar de las lluvias del último mes, tras un prolongado tiempo de sequía, al dique La Quebrada le cuesta subir de nivel.
Una razón es que en la cuenca serrana que alimenta los afluentes de este pequeño lago llovió en menor proporción que en otras regiones del centro y sur cordobés, y aun de las sierras. Pero, además, este embalse del que se abastecen de agua potable Río Ceballos, Unquillo y Mendiolaza, no tiene ríos importantes como afluentes, sino arroyos alimentados por vertientes que sufrieron en mayor medida la sequía y por su dimensión los efectos de la deforestación y el crecimiento de las urbanizaciones en la región.
El área complicada con la emergencia hídrica coincide con la región que más crecimiento demográfico ha tenido en la última década en la provincia de Córdoba.
Con esta obra en La Calera, Mendiolaza y algo más de la mitad de Unquillo ya no se abastecerán del bajo dique La Quebrada. Si las promesas se cumplen, desde abril el aporte de agua desde la planta de La Calera hacia las Sierras Chicas, cuando se culmine la segunda etapa de ampliación, será aún mayor.
De ese modo, el próximo verano podría imaginarse sin emergencia hídrica, aunque algunos creen que habrá que seguir observando la evolución de niveles del dique La Quebrada para confirmar de que efectivamente inicie una etapa de recuperación y de que el agua que le ingresa no sea menor a la que es extraída.
