Desde Cutral Co los funcionarios están preocupados porque a diferencia del verano pasado, los problemas con el suministro de agua se agravaron. En especial durante el fin de semana último donde los cortes programados debieron prolongarse.
Piden que sea revisada una válvula que conecta a una cañería de 600 milímetros y que lleva el líquido a Huincul.
"El agua no está ingresando a la hora prevista. El personal entra a primera hora para controlar el horario y hacer la distribución", dijo el presidente del IMAI, Guillermo Mercado.
Este organismo es el encargado de la distribución del líquido a las redes domiciliarias en Cutral Co. La cuadrilla de operarios recorre de manera habitual las "válvulas" para controlar que el líquido llegue a los hogares y en algunos casos, la verificación se hace en algún domicilio tomado al azar.
En particular, durante este fin de semana, la falta de agua se profundizó, en especial en los barrios más altos. "Los más perjudicados todos los veranos son los vecinos del Nehuen Che y de las 176 Viviendas", acotó Mercado.
Informó que mantuvo un diálogo con el responsable del EPAS aquí para que se verifique la "válvula de la conexión directa a la línea de Plaza Huincul que si no está regulada descomprime en gran parte a la cañería de 600 milímetros", añadió. Más adelante, refirió que para operar esa válvula, la llave la tiene el personal de Plaza Huincul. Pero "más allá de eso el EPAS nos tiene que dar la garantía que nos entrega agua como corresponde para equilibrar el sistema".
Mercado expresó que el año pasado "no tuvimos tantos inconvenientes como este verano para el agua". Ante este panorama, el funcionario subrayó que no se puede hablar sobre el cobro del servicio
"La postura del Ejecutivo es que primero se retire la demanda que entabló el EPAS y que después podemos sentarnos a conversar", subrayó.

Reclamo vecinal
Un grupo de dirigentes barriales de las comisiones vecinales de Gran Neuquén Norte y Sur reclamó asistencia ante autoridades del EPAS porque, afirman, la falta de agua persiste en ese sector de la ciudad.
Lejos de confirmar las versiones oficiales que la semana pasada indicaron que el problema se había solucionado, los vecinos invitaron a las autoridades del ente provincial para que se acerquen al lugar y constaten personalmente la baja presión o, en muchos casos, directamente la ausencia del servicio.
"El gobernador, indudablemente, no nos cree que estamos sin agua", señaló el presidente de la comisión vecinal de Gran Neuquén Norte. Los vecinos, sin embargo, no plantearon situaciones extremas y ni siquiera llegaron a cortar la calle. "Trataremos de trabajar en conjunto. Se quedaron con nuestros teléfonos y van a haber contactos", explicó José Bascuñán.