Acueductos y Alcantarillados (AyA) analiza aplicar racionamientos de agua a unas 140.000 personas a partir de la segunda semana de febrero.
Entre las comunidades que se verían afectadas destacan: la ciudad de Escazú, San Antonio de Escazú, Ciudad Colón, parte alta de Alajuelita, San Juan de Dios de Desamparados, San Antonio de Coronado y Los Sitios de Moravia, todas de la provincia de San José.
Los abastecimientos regulados también se aplicarían en un sector de Pérez Zeledón, Esparza y Atenas.
Dicha medida obedece a la disminución de los caudales de las fuentes superficiales (ríos, quebradas y manantiales) que abastecen dichas zonas. Tal situación es producto de la escasez de lluvia en los últimos meses.
Ricardo Sancho, presidente de AyA, dijo que en algunos casos la reducción fue de hasta un 40%.
El jerarca destacó que, según las proyecciones del Instituto Meteorológico Nacional, tales condiciones ambientales se mantendrán hasta abril, por lo que las posibilidades de hacer los racionamientos toman fuerza.
“Todo dependerá del comportamiento de las lluvias y de la capacidad de ahorro del agua de los consumidores”, señaló.
De llegarse a acordar los racionamientos, estos se harían por períodos máximos de tres horas y previamente serían anunciados a los residentes de los sitios a los cuales se les aplicaría la medida.
Ricardo Sancho enfatizó en que en las plantas de Orosi, Puente Mulas y La Valencia, las cuales, en conjunto, suministran líquido a más de un millón de personas, no presentan disminuciones significativas en sus caudales.
Por otra parte, la Empresa de Servicios Públicos de Heredia, que distribuye agua a los residentes de esa provincia, también estudia realizar racionamientos para el cantón de San Rafael.
Natalie Montiel, directora de la unidad de negocios de agua potable, dijo que en febrero pondrán en funcionamiento un nuevo pozo en esa zona, con el fin de minimizar las eventuales regulaciones.
En problemas. A estos sitios que podrían sufrir escasez de agua, hay que sumarles un grupo de comunidades alajuelenses que desde hace tres meses reciben el líquido únicamente cuatro horas al día, de 1 a. m. a 5 a. m.
Se trata de El Coco, San José, La Cañada y El Roble.
En dichos lugares el problema se debe a una baja en el caudal del pozo Cacique, que abastece la zona (fuente subterránea), también debido a las pocas precipitaciones.
Durante semanas, los vecinos afectados han realizado manifestaciones y cierres de calles en busca de una solución del problema.
Eduardo Lezama, subgerente de AyA, dijo que la institución perforará un nuevo pozo, el cual estaría en funcionamiento dentro de cuatro semanas.
Sin ahorro. AyA ha anunciado la posibilidad de racionamientos para los primeros meses de este año desde setiembre del 2009.
Desde entonces la institución exhortó a los ciudadanos a reducir el consumo del líquido en sus actividades diarias en un 20%.
No obstante, entre octubre y diciembre pasados el ahorro apenas fue de un 2,5%. Sancho reconoció que para los meses venideros, debido al calor del verano, el consumo podría aumentar. En promedio, cada persona gasta 200 litros de agua al día; lo ideal es que el consumo baje a 160 litros. Colaboró: Francisco Barrantes.
Reparaciones tratan de mejorar sistemas de abastecimiento del líquido
Una de las estrategias que ha implementado Acueductos y Alcantarillados (AyA) para enfrentar los períodos de sequía es mejorar los sistemas de abastecimiento de agua.
Para ello, ha iniciado una serie de reparaciones y remodelaciones en las tuberías, estaciones de bombeo y líneas de distribución de diferentes acueductos
Entre las obras, destaca la remodelación del sistema de abastecimiento del acueducto de Pérez Zeledón, proyecto que pretende solucionar el déficit actual del líquido y la demanda proyectada.
Por otra parte, en el acueducto de Las Vueltas de La Guácima, el AyA tiene programado aumentar el volumen del tanque Reunión a 50 metros cúbicos.
Lo anterior beneficiaría a unos 70.000 habitantes.
La construcción del alcantarillado sanitario de la localidad turística de Puerto Viejo de Limón y la sustitución de redes del acueducto metropolitano de San José, son otras de las obras planteadas.
Reparación de fugas. El presidente de la institución, Ricardo Sancho, dijo que también se le está dando especial énfasis a la reparación de fugas de agua potable. Destacó que ha disminuido el tiempo de respuesta de las cuadrillas que atienden los desperfectos.
Según datos del AyA, de cada 100 litros de agua potable que se producen para la Gran Área Metropolitana (GAM), 30 se desperdician en fugas.
De igual forma, la Empresa de Servicios Públicos de Heredia aumentó el número de funcionarios que se dedican a la atención de estas fugas, según manifestaron sus representantes
AyA emprende nuevo alcantarillado
Contrato con consorcio dotará de 360 km de tuberías a 10 cantones
Obra incluye una planta de tratamiento para aguas; su costo es de $270 millones
En un lapso de cinco años, los 2.800 litros por segundo de aguas residuales que producen 10 cantones del Valle Central serán químicamente tratados antes de ser vertidos en los ríos.
Ese es, en pocas líneas, el objetivo del Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA), que ayer puso en marcha el Proyecto de Mejoramiento Ambiental del Área Metropolitana.
Dicho plan consiste en rehabilitar y construir un nuevo alcantarillado en nueve cantones josefinos y uno de Cartago, para que todas las aguas residuales se envíen a una planta de tratamiento que se construirá en La Uruca, San José.
El proyecto se inició oficialmente ayer con la firma del contrato entre el AyA y el consorcio franco-japonés NJS-Sogreah, que tendrá a cargo el estudio y diseño para la rehabilitación y desarrollo de la nueva infraestructura subterránea.
Para la realización de ese primer trabajo, el Estado costarricense pagará al consorcio $17,4 millones, aunque el costo total del proyecto – que consta de varias etapas– asciende a $270 millones.
El plan tiene dos fuentes de financiamiento: $130 millones de un préstamo del Banco Japonés para la Cooperación Internacional –aprobado por la Asamblea Legislativa en el 2006– y $140 millones que aportará el Estado.
El gerente del proyecto por el AyA, Francisco Brenes Maltés, informó ayer de que una vez concluida la obra, la cobertura de alcantarillado pasará de 540.000 habitantes a poco más de un millón.
El funcionario aseguró que en el 2015, cuando todo el proyecto esté terminado, ni un solo litro de agua residual de la periferia de San José llegará a los ríos sin haber pasado por la planta de tratamiento.
“Conectar” viviendas. Los cantones beneficiados con el nuevo alcantarillado serán Desamparados, Goicoechea, Alajuelita, Vázquez de Coronado, Tibás, Moravia, Montes de Oca, Curridabat y el Central de San José.
También está incluido el cantón de La Unión, Cartago.
El propósito del AyA será construir 360 kilómetros de tuberías secundarias y fortalecer los cuatro colectores por donde viajarán en conjunto las aguas residuales.
Según Brenes, con la adjudicación de los diseños a NJS-Sogreah, solamente quedan pendientes las licitaciones para la construcción de las estructuras subterráneas y de la planta de tratamiento.
Esta última es la que está más avanzada, afirmó el ingeniero, pues en tres meses quedará resuelta; en ella participan dos empresas españolas y una francesa.
El plan establece que en el 2013, cuando esté muy avanzada la construcción de las nuevas tuberías y de la planta, se conectarán las viviendas al nuevo servicio.
Este trabajo no implicará modificaciones estructurales para las residencias o edificios.
Ricardo Sancho, presidente ejecutivo del AyA, garantizó que durante las labores en el alcantarillado, serán “pocas” las superficies asfálticas que tendrán que levantar para colocar la tubería.
De los ríos a La Uruca. Sancho reconoció que en la actualidad todas las aguas residuales del Valle Central son vertidas directamente a los ríos Torres, María Aguilar, Rivera y Tiribí.
Todos ellos alimentan la cuenta del río Grande de Tárcoles, que desemboca en el océano Pacífico.
Por ello, en el 2015 –afirmó Sancho– todas las aguas irán a la planta de tratamiento, que se espera descontamine los ríos hasta en un 90%. “El Tárcoles dejará de ser una cloaca a cielo abierto”, aseguró el funcionario.
La planta estará en un lote de 30 hectáreas, ubicado cerca del Parque de Diversiones. |
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