Vecinos del barrio General Belgrano, de la localidad de González Catán, advirtieron sobre el mal funcionamiento de muchas de las bombas de achique, las cuales fueron colocadas por AySa para el drenaje de las napas de esta y otras partes bajas de La Matanza a partir del establecimiento de las obras de red de agua potable, con lo cual al dejar de ser utilizados los bombeadores domiciliarios para proveerse de aguas subterráneas, las mismas comenzaron a saturar toda esa área.
En el distrito hay distribuidas aproximadamente unas seiscientas bombas de achique, encargadas de extraer el agua de las napas que ya no son utilizadas porque ahora se cuenta con el servicio de agua corriente, y la lleva a un arroyo cercano.
De acuerdo a la denuncia de los pobladores, de esas bombas disponibles, “el 50 % estarían rotas”, debido a que no tienen los cables que las conectan a la energía eléctrica porque son robados.
Con las bombas de achique se consigue tener las napas controladas, es decir, con un nivel de agua bajo, pero cuando estas no cumplen con su cometido, el líquido tanto pluvial como cloacales comienza a emerger hacia la superficie.
Enrique Usiño, vecino de este barrio, contó en el móvil de la emisión radial de NCO, “Desde la Redacción”, que para que este inconveniente se soluciones “estamos haciendo una carta abierta al secretario de Obras Públicas de La Matanza, en este caso por intermedio de él tendríamos que comunicarnos con AySa”.
El hombre explicó que “las bombas de achique han quedado prácticamente sin funcionar, se han robado los cables y todavía no fueron colocados. Al dejar de funcionar, las vertientes empezaron a subir, y en las últimas semanas que llovió dos días seguido los pozos de los baños se empezaron a llenar”.
Además, advirtió que “estas bombas fueron colocadas antes del agua (potable), porque sabían muy bien que después al no poder sacar de la perforación de cada casa, iban a aparecer estos problemas”. |
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